miércoles, 11 de julio de 2012

Día de tormenta.


Amanecía verde el campo
Cuando el cielo gris se mostraba,
Los meteorólogos anunciaban chubascos
Y la luna una tormenta envenenada.

El rocío era un espejo donde la luz se estrellaba
Y miles de hormigas se ahogaban,
Porque a veces lo más bello, es lo que más daña.

Desde lo alto las nubes amenazaban,
Y el arroyo corría ayudado por la corriente
Breves ondas en su superficie se formaban
Que contribuirían a las olas de la gran masa salada
Donde los sueños se ahogaban.