Decías que lo era todo para ti.
Y ni siquiera me diriges la palabra.
Fuimos todo.
No queda nada.
Un fugaz murmullo.
Una débil huella en lo más profundo de mi mirada.
Y ni siquiera me diriges la palabra.
Fuimos todo.
No queda nada.
Un fugaz murmullo.
Una débil huella en lo más profundo de mi mirada.